Hace 135 años nacía el automóvil y el mundo cambió

En 1886, Carl Benz patentaba el primer vehículo motorizado y, meses depués, Gottlieb Daimler presentaba su carruaje de cuatro ruedas a gasolina.

Lá última década y la que está por venir se convertirá sin dudas en el período en el que la tecnología avanzó más rápido dentro de la industria automotriz.

El avance de los autos eléctricos, la evolución en conectividad y los sorprendentes asistentes al manejo que anticipan la inminente conducción autónoma surgen imparables para crear una movilidad más limpia, conectada y segura.

Pero todo este avance tuvo su inicio hace más de un siglo, cuando los “Elon Musk” de finales del Siglo XIX se empeñaban por crear un carruaje que prescindiera de los caballos y que tuviera mayor velocidad de desplazamiento.

Hace 135 años se registraba el nacimiento del automóvil moderno, que sorprendió al mundo y que cambió para siempre la manera en la que se desplazó la humanidad.

El 29 de enero de 1886, el ingeniero Carl Benz solicitó en Berlín la patente de su triciclo motorizado. Así nació uno de los inventos más importantes de la historia de la humanidad: el automóvil. La creación de Benz es considerada un símbolo por excelencia del espíritu pionero y marcó el comienzo de una nueva era en la movilidad.

Benz había iniciado su actividad junto a unos socios con un taller de bicicletas, que con el tiempo fue creciendo hasta llegar a la producción de motores industriales a gas, en Mannheim. Y luego comenzó a trabajar con el que sería su gran invento. Instaló en un triciclo un motor monocilíndrico, de 958 cm3 y 0,75 CV, refrigerado por agua.

El certificado de nacimiento del automóvil lleva el número DRP 37435 y registró el invento del “vehículo motorizado con motor de gasolina” presentado por Benz en enero de 1886 en la Oficina Alemana de Patentes Imperial en Berlín. Ese documento forma parte del Programa Memoria del Mundo de la Unesco.

Pero aquel invento parecía haberse adelantado a su tiempo, ya que había llegado mucho antes de lo que la gente estaba preparada para recibirlo. Aunque también se sabía que toda la genialidad en ingeniería que tenía Benz le faltaba a la hora de comercializar y publicitar sus inventos.

En esta historia fue fundamental la participación de Bertha Ringer, esposa de Carl, ya que fue la que tomó las riendas del asunto justo antes de que pasara a ser un invento olvidado.

Bertha Benz tuvo un papel trascendental y se convirtió en la primera persona en realizar un recorrido de larga distancia en un automóvil. En 1888, junto con sus dos hijos y sin que lo supiera su marido, Bertha hizo el trayecto Mannheim-Pforzheim cubriendo unos 105 kilómetros.

Con la necesidad imperiosa de detenerse en cada farmacia de pueblo para comprar bencina que le permitían volver a tener combustible en el depósito{ósito. Los caminos en mal estado, pensados principalmente para caballos y carruajes, y distintos problemas técnicos que se suscitaron en la travesía no impidieron que su objetivo se completara.

De esta manera, ella logró el objetivo de darle publicidad a la creación de su esposo ya que el viaje generó gran repercusión.

El invento de Daimler

Hay que volver un poco a 1886, ya que solo unos 100 kilómetros de distancia de Benz y sin conocerse hasta ese momento, Gottlieb Daimler creó tan solo meses después el primer vehículo motorizado de cuatro ruedas del mundo.

Daimler se formó en Stuttgart y se decidió por la ingeniería mecánica luego de haber tenido un pasado en la fabricación de armas. Fue director técnico de la empresa de Nikolaus Otto, el inventor del motor de cuatro tiempos. Y a partir de allí vio el potencial que esta máquina tenía.

Abandonó la firma en 1882 y se junto con otro pionero de la industria, Willem Maybach, y crearon su propia empresa. Tres años después patentaron el primer motor de combustión interna con capacidad para impulsar un vehículo con cierta velocidad.

Poco tiempo después presentaron el carburador, que les permitía usar nafta como combustible. De hecho, la estrella que lucen todos los autos de Mercedes-Benz fue elegida por Daimler para simbolizar la capacidad de sus motores para usarlos en tierra, mar y aire.

Las invenciones de Carl Benz y Gottlieb Daimler, cuyas empresas se unieron en 1926 para crear la compañía Daimler-Benz que originó el nacimiento de la marca Mercedes-Benz, trajeron una revolucionaria y nueva dimensión a la movilidad.

Ambos marcaron un hito abriendo camino a la libertad individual y un factor económico de enorme importancia.