Descubrí cuál es el auto más caro del mundo

Fue presentado por la marca francesa en el Salón de Ginebra. Es el nuevo auto más caro del mundo: pagaron 19 millones de dólares.

Un lanzamiento así tenía que tener un marco como el del Salón Internacional del Automóvil de Ginebra, lógicamente. Lo que tuvo lugar fue la presentación de La Voiture Noire, el nuevo vehículo de Bugatti, que más allá de ser un auto increíble también es desde ahora el más caro del mundo: pagaron 19 millones de dólares por él. De esa forma, superó el récord que poseía el Rolls Royce Sweptail vendido en 2017 por 13 millones de dólares, un exhuberante automóvil del que sólo se fabricó una unidad.

El comprador de La Voiture Noire no fue revelado, y el presidente ejecutivo de Bugatti, Stephan Winkelmann, apenas reveló que pagó unos 16,7 millones de euros por el auto, equivalente a unos 19 millones de dólares. Como el Rolls Royce mencionado anteriormente, este también es un auto único. Según su diseñador, Achim Anscheidt, puede parecer un precio caro si uno lo piensa como un automóvil, pero no si uno piensa que es una obra de arte.

Otros autos han sido vendidos por un precio mayor al de La Voiture Noire, como viejos Bugatti y Ferrari subastados, pero esta es la mayor cantidad de dinero que se ha pagado en la historia por un vehículo nuevo. Anscheidt, a cargo del diseño de Bugatti desde 2004, manifestó que en este auto intentó capturar el espíritu de Jean Bugatti (primogénito de Ettore Bugatti, fundador de la empresa) y su Type57SC Atlantic Coupé personal, una de las cuatro fabricadas, que se rumorea que desapareció en la Segunda Guerra Mundial. El nombre, en francés, no significa más que “auto negro”.

El techo del nuevo Bugatti, extremadamente bajo, es similar al de aquel auto, como también la prominente parrilla y la forma redondeada de las ventanas del habitáculo. “Evoca al pasado, pero no es retro”, comentó Anscheidt. En cuanto a la mecánica, este auto estará impulsado por un motor de 16 cilindros similar al del Bugatti Chiron, de casi 1.500 CV con un par de 1.600 Nm, para poder llegar a una velocidad de 400 kilómetros por hora como ese otro Bugatti.

 

Lo curioso es que el auto presentado, en realidad, no es el que se llevará el afortunado millonario, sino que no es más que una representación hecha en 16 semanas. Según su diseñador, el verdadero auto podría tardar más de dos años en ser entregado a su comprador.